Tipos de picaduras de insectos, ¿cómo identificarlas?

Aprende a identificar los diferentes tipos de picaduras de insectos y cómo tratarlas adecuadamente para disfrutar plenamente de la temporada estival. ¡Protege tu piel!

El verano es una época maravillosa para disfrutar del aire libre, pero también es la temporada en la que los insectos son más activos. Aunque muchos de estos bichitos son inofensivos, otros pueden causar picaduras dolorosas e irritantes. Aquí tienes algunas pautas para identificar las picaduras según el insecto, además de una serie de consejos para protegerte y aliviar las picaduras durante esta temporada. 

Casi todos los tipos de picaduras de insectos tienen un aspecto bastante similar entre ellas, es por ello que en cuanto notamos el picor, tendemos a pensar que se trata de un mosquito. De hecho, los expertos coinciden en que resulta muy complicado identificar exactamente al culpable, al menos que lo pilles in fraganti. 

A pesar de esto, no todos pican por igual y, seguramente, alguna vez te haya aparecido una picadura que no has sabido identificar, por eso es importante aprender a diferenciarlas. Estas pueden ser de diferentes tamaños y pueden crear distintas reacciones dependiendo del insecto y la persona: irritaciones y rojeces, hinchazón, sarpullidos, reacciones alérgicas… la forma y el color que adopte la zona que rodea al lugar de la picadura, así como la sensación de picor, pueden ayudar a relevar la identidad del insecto atacante. 

Picaduras de Mosquitos 

Los mosquitos son los insectos que más pican en el mundo. Por tanto, no es de extrañar que sea uno de los tipos de picaduras más conocidos y más fáciles de reconocer. Estas se presentan como pequeñas protuberancias redondas e hinchadas, normalmente más claras o rojas que la piel.

Uno de los síntomas principales es la picazón, aunque en ocasiones y dependiendo de la persona, también pueden generar dolor. Además, hay tipos de mosquitos, como el mosquito tigre, cuyas picaduras pueden generar un picor intenso, ampollas o hinchazón en la zona. 

Este tipo de picaduras aparecen principalmente por la saliva que desprende el insecto cuando nos succiona la sangre. Aunque los síntomas no suelen ir más allá, debemos vigilar los síntomas de resfriado o gripe tras una picadura, especialmente si estás fuera del país, ya que pueden ser transmisores de enfermedades como el virus del Nilo Occidental o el Zika. 

Picaduras de Abeja o Avispa 

Este tipo de picaduras se diferencian de las de los mosquitos porque se ve la marca de dónde se ha clavado el aguijón - con un punto rojo y blanco - además, si te ha picado una abeja, el aguijón te quedará dentro, por lo que deberás extraerlo con cuidado. 

Respecto a los síntomas, uno de los principales es el ardor y dolor que produce, que puede durar uno o dos días. Si empiezas a notar hinchazón severa en el rostro, labios y garganta, urticaria, mareo o náuseas, lo mejor será que acudas lo más rápido posible a un médico, pues puedes tener alergia. 

Picaduras de Arañas

Al igual que el resto de insectos, las arañas te producirán enrojecimiento e hinchazón. La diferencia principal es que estas suelen dejar dos marcas de pinchazos en la piel ligeramente separados. 

Suelen causar un dolor leve y un poco de picor, ya que inyectan algo de veneno, pero no es peligroso y desaparece con el paso del tiempo. Dependiendo del tipo de araña, hay que tener cuidado, las reclusas paradas y las viudas negras pueden causar lesiones, espasmos musculares, temblores y náuseas. 

Picaduras de Pulgas

Puedes identificar este tipo de picaduras por producirse varias a la vez y de forma agrupada. Enrojecerán tu piel y te producirán hinchazones que te picarán inmediatamente, unos síntomas que podrían confundirse con la dermatitis atópica, que produce una extrema sequedad en la piel, que se enrojece y pica debido a la irritación.

Estas aparecen como pequeñas protuberancias rojas en líneas o racismos. Son pequeñas y suelen tener halos rojizos alrededor. Estas picaduras producen una gran picazón e incluso pueden llegar a doler y provocar erupción alrededor de la zona afectada. 

Picaduras de Hormigas

El tipo de picadura de hormiga roja producen hinchazón, enrojecimiento y la presencia de un poco de pus. Incluso, pudiendo llegar a doler y transformarse en ampolla. Su aspecto es como una roncha roja con el centro blanco y elevado.

¿Cómo tratar las picaduras de insectos? 

En la mayoría de los casos bastará con tratar estos tipos de picadura en casa, antes de aplicar algún tratamiento, lava la picadura con agua y jabón para evitar posibles infecciones. Además, también puedes aplicar hielo envuelto en un trapo o una toalla sobre la zona para reducir la hinchazón.

En el caso de que el picor sea muy intenso o se haya inflamado demasiado, puedes recurrir a una crema con corticoides o un antihistamínico. 

Otros productos naturales, como el aloe vera o la miel, pueden ser unos buenos aliados para tratar las picaduras de insectos. En el caso del aloe vera, existe cierta evidencia de que permite tratar las condiciones de la piel, ya que cuenta con propiedades antiinflamatorias y curativas. En cuanto a la miel, aplicada en una picadura, puede reducir la inflamación y evitar infecciones. 

Repelente de insectos

Utiliza un repelente de insectos adecuado para mantener alejados a los insectos. Asegúrate de elegir uno acorde a la edad, especialmente en bebés o niños. Aplica el repelente en la piel expuesta, y recuerda que no por echar mayor cantidad o usarlo cada menos tiempo, será más efectivo. Lo idóneo es seguir las indicaciones del producto.

Ropa protectora

Viste ropa de manga larga, pantalones largos y calcetines cuando estés en áreas propensas a los insectos (como por ejemplo el campo, especialmente con hierba alta), o si visitas zonas endémicas o con alta incidencia de ciertos insectos. Elige colores claros y evita los aromas dulces y brillantes (colornias florales o frutales), ya que estas atraen a los insectos. 

Mosquiteros y telas protectoras

Mantén las ventanas y las puertas de tu casa cubiertas con mosquiteras para evitar que los insectos entren en casa. También puedes considerar el uso de telas protectoras alrededor de tu área de descanso al aire libre, como una terraza o un patio, para evitar las picaduras mientras disfrutas del aire libre. Por las noches revisa que no dejas ninguna luz encendida que pueda atraer a insectos como los mosquitos.

Remedios caseros para evitar y aliviar las picaduras

Si a pesar de tus precauciones has sido picado, hay varios remedios caseros que puedes probar para aliviar el malestar. Aplicar una compresa fría o una bolsa de hielo (recuerda envolverla en un trapo, ya que el hielo aplicado directamente puede llegar a quemarte) sobre la picadura, puede reducir la hinchazón y el picor. También puedes utilizar lociones o cremas con ingredientes como calamina, aloe vera o árbol de té, que tienen propiedades calmantes.

Acude a un médico por picadura de insecto

Si experimentas una reacción alérgica grave como dificultad para respirar, hinchazón excesiva, náuseas, vómitos o mareos, busca atención médica de inmediato. Estas reacciones pueden ser peligrosas y requieren atención profesional de urgencia para tratarlas cuanto antes. Si, por otro lado, la picadura dura más de una semana o te genera molestias significativas, también es aconsejable visitar a un médico.

Para estar cubierto ante cualquier imprevisto, es aconsejable que tengas contratado un seguro de salud. Por ejemplo, Salus Ensencial, nuestro Seguro a un precio muy económico y con copagos bajos, con una cobertura ambulatoria, con asistencia primaria, consultas con especialistas, medios de diagnóstico, tratamiento rehabilitador, etc.